LITIASIS BILIAR

¿Qué es?

La litiasis biliar es la presencia de cálculos (“piedras”) en la vesícula biliar o en los conductos de la bilis, que aparecen por la precipitación y cristalización de las sales biliares en los mismos.

La localización más frecuente es la vesícula biliar (colelitiasis),hasta un 85% de los casos.

En un 10% se encuentran en el conducto biliar extrahepático (coledocolitiasis) a la vez que en la vesícula biliar y en muy pocos casos sólo se encuentran el colédoco, encontrándose la vesícula sin litiasis..

Los cálculos de la vía biliar (intrahepáticos o coledocolitaisis) pueden provenir de la vesícula biliar o formarse en el conducto, ocurriendo esta situación en pacientes . En los países occidentales, el 95% de los pacientes con CDL tienen también colelitiasis. A la inversa, solo el 10- 15% de los pacientes con colelitiasis tienen una CDL concomitante3.

En nuestro medio es excepcional la presencia de cálculos en las vías biliares intrahepáticas.

¿Cuáles son los síntomas?

Aunque en la mayoría de los casos la presencia de litiasis biliares no producen síntomas, hasta en un 20% de los casos pueden aparecer síntomas o complicaciones.

La manifestación principal es el cólico biliar, producida por obstrucción intermitente del conducto de la vesícula (cístico) por un cálculo, lo cual produce un dolor “en latigazos” bajo el esternón y/o las costillas derechas, siendo común,además, que se asocie a náuseas y vómitos.

Cuando el dolor se prolonga por un tiempo superior a 5-6 horas y se hace más constante y selectivo subcostal, asociando febrícula/fiebre, tiritona, mal estar general y dolor a la palpación en dicha localización, debe sospecharse una inflamación de la vesícula (colecistitis), lo cual requiere valoración y tratamiento hospitalario.

En la mayoría de ocasiones, la litiasis es expulsada del cístico hacia el conducto biliar extrahepático (colédoco) y de éste al tubo digestivo, siendo expulsada del cuerpo con las heces.

No obstante, en un 10% de los casos, las litiasis permanecen en el colédoco, pudiendo obstruirlo, impidiendo que la bilis se libere al intestino y se acumule. En tal caso, se adquiere un tinte amarillento de piel y mucosas (ictericia), la orina se vuelve oscura (coluria) y las heces blanquecinas (acolia), pudiendo desarrollar además infección de la bilis (colangitis) e incluso obstruir la salida del conducto del páncreas(de modo permanente o por inflamación), produciendo una pancreatitis aguda.

¿Cómo se diagnostica?

La mayoría de las veces se diagnostican con una ecografía abdominal, no precisando de más exploraciones.

Sin embargo, cuando se localizan en el conducto extrahepático de la bilis (colédoco) a veces es difícil observarlos por dicha técnica precisando de una Colangio-RM.

No obstante, si bien es un técnica invasiva, la más sensible para valorar el área biliopancreática y la presencia de litiasis de muy pequeño tamaño (microlitiasis) es la ECOENDOSCOPIA (realización de una ecografía desde el tubo digestivo mediante un tubo de endoscopia con una sonda de ecografía en su punta).

Su especialista de Digestivo decidirá cual o cuáles de dichas pruebas son necesarias en su caso.

Además,no hay que obviar una buena historia clínica, así como un análisis de las pruebas de función hepática y cuantificación de bilirrubina en sangre, las cuales suelen estar alteradas en los cuadros de coledocolitiasis.

¿Cómo se trata?

En los pacientes asintomáticos no es necesario ningún tratamiento, salvo en situaciones muy concretas que valorará su especialista (vesícula en porcelana, coexistencia con pólipos vesiculares…).

En pacientes sintomáticos el tratamiento final de cualquier patología (colelitiasis, coledocolitiasis, pancreatitis aguda de origen biliar) consiste en la extirpación quirúrgica de la vesícula (colecistectomía) por parte del servicio de Cirugía, ya que el 65% de los pacientes sintomáticospresentarán recurrencia clínica en los dos primeros años, con una incidencia anual de complicaciones del 1-2%.

En pacientes con coledocolitiasis, de modo previo a la colecistectomía es preciso extraer la litiasis del colédoco, siendo la vía de elección la endoscópica mediante una técnica llamada C.P.R.E (colangiopancreatografía retrógrada endoscópica).

En pacientes con colangitis y colecistitis se precisará de tratamiento antibiótico y vigilancia hospitalaria, siendo de elección la colecistectomía o, si la situación del paciente no permite una cirugía, el drenaje de la vesícula por técnicas de radiología intervencionista en los casos de colecistitis.

El tratamiento no quirúrgico (quelantes de las sales biliares) presenta baja eficacia y altas tasas de recurrencia. Por ello, sólose suele utilizar en pacientes con coledocolitiasis de repetición en combinación con las CPRES que precisara, en un intento de hacer la bilis “menos espesa”, y por tanto, intentar reducir la formación de piedras.